Podemos ofrecerle palabras de devolución, alabanza, petición y adoración mientras llevamos a agarradera nuestras actividades diarias. Es una forma de invitar a Altísimo a ser parte de cada aspecto de nuestra vida.Si la oración es la relación de un sujeto con un predicado, ¿quiere proponer que estos dos utensilios deben estar siempre presente